Hoy en la parroquia Nuestra Señora de La Merced, San Salvador, conmemoramos a nuestro patrono San Miguel Arcángel, conocido como el Príncipe de la Milicia Celestial.
La misa fue celebrada por el Padre Francisco Morán, Administrador Diocesano del Ordinariato Militar y Policial quien brindó un emotivo mensaje a nuestros héroes.
«Siempre un policía está llamado por vocación a ser un servidor del bien, estamos llamados a dar muestra de buena conducta. Servir y proteger, ante todo, esa debe ser nuestra misión» dijo.
También hubo un momento para recordar a los compañeros que a lo largo de estos 31 años de existencia de la institución han ofrendado su vida por salvar la de otro salvadoreño.
Durante la celebración eucarística se presentaron como ofrendas:
Como mensaje final el Vicario General del Ordinariato Policial, Marco Tulio García, reconoció el trabajo que ha realizado el personal operativo para que ahora podamos vivir en paz, pero llamó a no dejar de poner la fe en Dios.
A nivel nacional todas las delegaciones se unieron a la celebración del día de San Miguel Arcángel, el protector de nuestros policías quienes al igual que él, son valerosos defensores en la batalla contra el mal.